Partiendo de la base que conseguir el número mágico de los treinta y un escaños que asegura la mayoría en la Cámara, era una tarea imposible para cualquiera de las fuerzas políticas que se presentaban, la victoria real sólo se produce cuando una de ellas es capaz de aglutinar esos 31 votos, no por la vía de las urnas cómo digo, pero sí por el camino de los pactos. El ganador será aquel partido capaz de conseguir los parlamentarios necesarios gracias a su habilidad para consensuar voluntades o a disfrutar de una mejor situación táctica que les facilite el pacto.
Por lo tanto nos encontramos ante la misma paradoja de cada elección, todos han ganado en estas elecciones. Diría un cínico que no se sabe quién ha ganado, pero todos sabemos quienes vamos perder, ¿los votantes? claro compañero, los que hemos ido a votar, los que palmamos siempre. Ellos ganan, nosotros perdemos.
El PP ha conseguido ser el partido más votado al Parlamento, muy bien, igual no les sirve para nada, pero por ahí andan encantados de haberse conocido y exultantes de gozo. Mientras, los de CC consiguen empatar a escaños y se dan por vencedores, creen que son los únicos capaces de reunir los votos suficientes para que Rivero sea investido nuevamente como Presidente del Gobierno de Canarias, por tanto alborozados y felices.
Los de José Miguel Pérez han sufrido un varapalo impresionante, pero andan medio tranquilos; la enormidad del desastre socialista en el país les justifica y pese a lo sucedido en Canarias: peleas intestinas, nombramientos de gestoras o escisiones varias, pueden maquillar sus errores en el desastre absoluto y general del PSOE. Por otra parte están encantados porque tienen muchísimas posibilidades de convertirse en “llave”, no es que vayan a hacer un módulo de cerrajería, pero el ser los terceros de la lista los hace más apetecibles, más sexys como socios del pacto de gobierno, porque naturalmente no pueden aspirar a la presidencia y eso amigos míos facilita mucho las cosas.
Román Rodríguez anda galleando, es cierto que no es tarea fácil conseguir tres parlamentarios, pero no creo que se engañe. Irremisiblemente me recuerda a Pirro de Epiro, no es que el parlamento canario sea Heraclea, ni la calle Teobaldo Power se parezca al río Siris, pero lo de los tres parlamentarios reúne todas las condiciones para resultar una victoria pírrica. (Para los de la LOGSE: dícese de aquél éxito conseguido a precio muy caro y de poca o ninguna aplicación práctica).
Dice Rivero ¿y mañana qué?, pues mañana a pactar como está mandado ¿qué hará Rivero y los de CC?, no lo sé. Creo, con muchísima gente que pactará con el PSC-PSOE al menos hasta las elecciones generales, esta decisión tiene varias virtualidades que pueden interesar a los nacionalistas. La primera poner en valor sus votos actuales en Madrid, empecinándose en apoyar a Zapatero hasta el final, lo que les permitiría seguir ordeñando a la cabra que, si bien está casi seca, todavía algo se puede aprovechar y no están las cosas como para dejar de chupar del bote. Otro aspecto no menos importante es el de doblegar al PP, que por ahora manifiesta su decisión de intentar presidir la comunidad a toda costa.
Yo si fuera Rivero, lo que gracias a Dios es imposible, quizás intentaría gobernar con los socialistas en un principio para dejarlos caer cuando tácticamente me interesara y lograr el apoyo del PP para gobernar en solitario con “los apoyos puntuales” de los populares que ya se habrán librado, tras las generales, de la presencia de José Manuel Soria, quién estoy convencido, que de no gobernar, se apuntará a las elecciones al Congreso de los Diputados en las próximas legislativas y emprenderá su nueva aventura madrileña.
Eso lo dice mucha gente y no es nada original, pues les voy a confesar una cosa, lo del pacto CC-PSC-PSOE lo tiene tan claro todo el mundo, que a lo mejor, o a lo peor, Dios dirá, Rivero se atreve con cualquier otra pirueta, que esto de los pactos, como sabe todo el mundo, son cosas que las carga el diablo. La pirueta madrileña de Soria que he descrito, bien pudiera protagonizarla Rivero, cosas más difíciles se han visto.
Pero si me preguntan me inclino a pensar que vamos a tener pacto CC-PSOE, transitorio, pero pacto al fin y a la postre.
Antes de finalizar quisiera hacer una reflexión sobre las encuestas. Todas anunciaban un triple empate, la realidad les ha pasado por encima, no hay tal empate y los socialistas, tal y como veía cualquiera que quisiera ver, menos los zurdos más convencidos y las propias empresas dedicadas a estos menesteres, se han llevado el batacazo que todo el mundo esperaba. Cobran mucho y no aciertan demasiado, la mayoría de las veces bastaría escuchar lo que dice la calle y aplicar el sentido común. Que me perdonen los encuestadores no quiero mandar más gente al paro, de eso se ocupan, muy eficientemente por cierto, los socialistas a través del gobierno de Zapatero, pero hay que afinar mucho más.
Mañana los resultados nacionales y después otros análisis de la realidad más cercana, esperemos que el humo electoral se haya disipado ya y podamos ver todos, salvo los políticos, algo más claramente la situación.
En las anteriores autonómicas de 2007 el partido más votado fue el Psoe pero pactaron CC y PP para gobernar ellos.Eso es así
ResponderEliminarBueno, eso es tradicional, desgraciadamente diría yo, aunque me parece que lo que decía en el post es lo que va a suceder. Tampoco es que tenga mérito, casi todo el mundo pensaba en el mismo pacto. Gracias por el comentario y la lectura.
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