A Podemos se le complican las cosas
Tras el triunfo electoral conseguido por los seguidores de Pablo Iglesias, un éxito que sorprendió a propios y extraños, todo el mundo esperó conteniendo el aliento, el primer paso de Podemos; pero para sorpresa de propios y extraños nada sucedió, la cúpula de Podemos entró en una suerte de parálisis en la que nada hacían y poco o muy poco decían. Un error importante, porque de tener prevista la victoria, hubieran podido explotarla a satisfacción y al no hacerlo le dieron a los adversarios tiempo y espacio para decidir cómo se organizaban para frenar sus fiasco electoral y fallaron a sus votantes, que esperaban de sus líderes mucho más.
Podemos comienza a tener
serias dificultades, unas nacen en el seno de la propia organización y
otras provienen de las dudas que empiezan a pesar en el ánimo de los
ciudadanos sobre su capacidad real para
cambiarlo todo, tal y como prometían. Ya hay mucho votante que se está dando cuenta que los de Pablo Iglesias no tienen la varita mágica que necesitarían,
para cumplir sus promesas electorales.
Por poner un
ejemplo, lo de la Renta Universal Básica y el adelanto de la fecha de
jubilación a los 60 años supondrían, dicen los de Podemos, un coste anual
de 145.000 millones euros lo de la RUB y 20.000 millones euros más el asunto de la jubilación, lo que
obligaría a pagar a los ciudadanos el doble de los impuestos que ahora mismo pagamos,
así que por ahí me parece que verdes las han segado. No hay posibilidad alguna
de vender decentemente ese bodrio, que me parece el epítome de la demagogia y el populismo.
A la vista está que a la cúpula “circular” le está resultando muy difícil gestionar el inmenso
activo que le proporcionó su éxito electoral. Mientras el asunto estuvo en el estadio de predicar desde el púlpito que tan graciosamente les prestaban dos cadenas de
televisión nacionales, todo iba bien, pero cuando tras la victoria llegó la
hora de repartir trigo, de hacer cosas, de razonar sus proyectos, demostraron ser incapaces de hacerlo. Sus partidarios primigenios, ante la parálisis sobrevenida, comenzaron a exigirles que pasaran a
la acción y paralelamente sus votantes empezaron a mostrarse inquietos ante la
falta de concreción y planificación de Podemos, que ciertamente se enfrenta a
problemas más serios de lo que esperaban.
Los que habían predicado el amor por la
democracia directa, comenzaron a verle las orejitas al lobo, porque ya se sabe que de visita
todos somos buenos y claro, como nadie esperaba lo del 1.200.000 votos, todos
trabajaron encantados por aquello de cargarse el sistema, al fin y a la postre
de antisistemas se nutría principalmente Podemos, que ahora se mezclan en
un revuelto cajón de sastre con ex votantes sociatas, comunistas radicalizados, ex clientes de Rosa Díaz y algún pepero
despistado, lo que no ayuda demasiado a la cohesión ideológica del partido, pero en ese totum revolutum en cuanto le han
visto la punta al lápiz y han percibido las posibilidades que se abrían ante
Podemos, les ha entrado la prisa por controlar la organización y ya han comenzado las primeras puñaladas. Iglesias vio con temor la actividad de Izquierda
Anticapitalista que a cada día que pasa ocupaba más espacio en Podemos y decidió tomar medidas improvisadas de carácter centralizador que justificó explicando a su entorno que estaban dirigidas a evitar un "golpe de estado" de IA, ese es el panorama.
Por mucho que se empeñen en ocultarlo, en el seno de la organización
comienzan a surgir las primeras voces discordantes que se quejan del excesivo
protagonismo y el control que sobre Podemos ejercen Pablo Iglesias y Monedero,
a los que califican de poco democráticos. Yo de ellos me iría con cuidado que de poco democráticos a
revisionistas infames vendidos a la troika, no hay más que un paso, que esa
gente de la zurda radical no se anda con chiquitas y pasan del amor al odio en menos tiempo que tarda en persignarse un cura loco.
El problema radica en que las quejas sobre la falta de democracia
interna en Podemos son más que fundadas. En ninguno de los partidos de la casta, el
presidente o el secretario general pueden imponer el programa electoral, elegir
a dedo a su “ejecutiva” sin ningún tipo de participación de la militancia,
nombrar "digitalmente" a la persona que controle las finanzas y las cuentas, decidir quiénes van a ser los coordinadores, etc., etc.
La nueva Asamblea Ciudadana que se propone como modelo, no va a
solucionar estos problemas porque el proyecto está diseñado para que en otoño la militancia elija a los miembros que la compongan, entonces el órgano elegirá
a un portavoz, es decir a quien vaya a mandar en Podemos y el portavoz - Pablo
Iglesias, naturalmente- será quien elija
a los miembros de un Consejo de Coordinación, un órgano ejecutivo compuesto por 10 miembros
como mínimo y 15 como máximo, que serán los que bajo la presidencia del portavoz,
tomen todas las decisiones sobre la política que llevará a cabo Podemos hasta
la próxima Asamblea, que deberá reunirse dentro de tres años.
La base está que trina y los grupos
organizados que pululan en Podemos, peor, porque lo que se propone nada tiene
que ver, ni de lejos, con la democracia
directa y la horizontalidad prometida no se ve por ningún lado. Está clara la
voluntad de Pablo Iglesias de mantener en su mano todo el poder decisorio y eso
no se ve ni en los partidos de la casta. Nadie quiere ahora, cuando se han
encontrado con ese éxito electoral, ceder el poder y hay una serie de
grupos organizados en el seno de Podemos que como es natural le están haciendo
muy difícil la vida a la actual cúpula “circular”.
Hasta que llegue la fecha en que se convoque
la Asamblea Ciudadana, en Podemos se está llevando a cabo un debate interno a
través de internet, en una plataforma de
debate llamada “Plaza pública”, en ella se percibe clarísimamente el descontento
reinante entre los “pata negra” de la organización, las bases que trabajaron
desde el principio y que ahora tildan al proyecto de Pablo Iglesias de vertical
y falto de democracia interna.
“Al
documento le falta horizontalidad y mecanismos de participación de abajo a
arriba”, dice uno de los participantes, otro
añade “Se corta la iniciativa de los círculos. El Consejo dirige y acota el
debate y sólo nos queda asentir o disentir como borregos”, pero en líneas
generales las propuestas van dirigidas principalmente a limitar el poder de
Pablo Iglesias y democratizar la elección del Consejo de Coordinación.
Eso pasa entre los más fieles y comprometidos
desde el principio del proyecto, pero el malestar empieza a cundir entre la
masa de votantes que ven como todo aquello que se les aseguró era Podemos, en
cuanto se han acercado, aunque sea hipotéticamente el poder, se ha convertido en humo y en lugar de una organización satisfecha de su éxito electoral y que reme solidariamente en una sola dirección, se producen luchas intestinas por el poder y sufren con asombro y desagrado la reacción de la dirección actual, nada dispuesta a ceder el
control, desnaturalizando así la esencia primigenia
de ese proyecto.
Eso sucede ahora mismo, pero en cuantito estén más cerca las
elecciones municipales y con ellas la
posibilidad de hacerse con un acta que les dé un buen vivir durante cuatro
años, las puñaladas en esa “plaza pública” y en las de verdad, van a ser de alivio.
Podrán seguir predicando todo lo que se les
ocurra, pero se les ha visto el plumero, no tienen un programa que se pueda aplicar, todo lo
que ofrecen son promesas sin una base real y además han renegado de su
democracia horizontal y de la participación directa de la militancia, porque
mandar es muy bonito. Deberían explicar qué es lo que les diferencia de la “casta”.
¿Qué no han robado? No tiene demasiado mérito porque no han tenido oportunidad
de hacerlo, viéndole los andares a la perrita, ya veremos lo que sucede en cuanto
toquen ese poder, que ellos fueron los primeros en advertir, corrompe.
El que debería reflexionar es Pablo Iglesias,
empeñado en mantener el poder absoluto en Podemos, ya sabe él, lo ha repetido muchas veces, que el poder absoluto corrompe absolutamente, debiera incomodarle
ese apetito feroz que exhibe por el poder, pero no parece que le preocupe
demasiado.
Que no nos cuentan más milongas, son “casta”,
nueva, pero “casta” y de la peor especie.
Buenos días,¿ es falso que tras las elecciones Podemos adoptó unapostura pasiva y que sus líderes dejaron de aparecer en la tele? no. ¿Es falso que Pablo Iglesias presentó un proyecto de "ejecutiva", por internet, sin tiempo a reaccionar a el resto de los componentes de Podemos? No, ¿Es faldo que IA se está moviendo para hacerse con el poder en Podemos,o al menos así lo ha confesado Pablo Iglesias? No. ¿Es falso que la militancia se queja de la verticalidad del proyecto y de la falta de intervención de las bases? No. Así que amigo mío, de falso nada, sobre de lo que estoy comprado, ya sabes cree el ladrón que todo el mundo es de su condición. Buenos días.
ResponderEliminarPodemos no es otra cosa que un "marxismo-leninismo" refundado con un aderezo de populismo bananero.
ResponderEliminarEso de "Democracia Directa" no es otra cosa que comunismo puro y duro, sencillamente han cambiado el nombre, nada más.
Lo que pretenden terminaría, sin el menor género de dudas, en un estado de partido único, con un "soviet supremo".
Todo lo demás es palabrería, manipulación, algo que se les da muy bien. Lenin era un auténtico maestro en eso.
No haría falta ni leer su programa por varias razones:
ResponderEliminar1.- Son comunistas.
2.- Además de sus ya conocidos modelos de gobierno (Cuba y Venezuela) se suma ahora Argentina como "ejemplo de democracia".
3.- Quieren limitar la libertad de expresión de los periodistas no afines con denuncias y, además, pidiendo dinero a sus simpatizantes para realizar esas denuncias.
4.- Justifican los atentados terroristas de ETA con unos supuestos fines políticos.
5.- Ya pagamos demasiados impuestos y el dinero no llueve del cielo, sus propuestas económicas generarían una capa social de vagos bastante considerable.
6.- Quieren más estado y es ese, el estado, el principal cáncer de este país.
Hay más, pero para mi con el primero de los puntos que ya he detallado sería más que suficiente. Comunismo, no gracias, prefiero vivir la vida.
El punto 4 es totalmente falso. Nunca lo han justificado. Esto es una calumnia como tantas otras
EliminarPablo Iglesias manifestó que los crímenes de ETA tenían “explicaciones políticas”, así que falso, lo que se dice falso... Es uno de los errores más grandes de Pablo Iglesias, decir lo que pensaba sobre ese asunto. No puede haber justificación política a ninguna muerte. Y Podemos lo sabe, por eso el interés en negarlo.
Eliminar¿Como se puede tener la soberbia y la ignorancia de acusar a alguien, que da su opinión, de comprado? Increíble, hagaselo ver, está usted fatal.
ResponderEliminarLa dictadura sin poder. Ya se desnuda el "centralismo democrático", la demagogia del descalabro y la caricatura del engaño. Podemos sigue una estrategia de rompimiento, faccionamento y consiguientemente, debilitamiento de la sociedad española. Podemos puede joder bastante, pero resolver nada. Desde la autocracia revolucionaria, solo depotismo, sumisión y pibreza.
ResponderEliminarPor favor Sr Dante...Vea menos La Sexta e infórmese mejor leyendo prensa imparcial y contrastando con otros programas y noticias si prefiere seguir viendo la tele del Sr Roures, lo que en verdad le cuentan. ¿De verdad usted cree que Miguel está comprado? Hágaselo mirar hombre...!. Me temo que usted cumple perfectamente con los abducidos de Podemos. ¡Y qué grande será la caída!
ResponderEliminar