¿Oiga y de lo mío qué hay?
Me parece que van a tener que
esperar mucho tiempo para que alguien atienda lo que a ustedes les preocupa.
Las elecciones han dado su resultado y aunque escribo esto cuando sólo se ha escrutado el 89,1%, los problemas de los
ciudadanos quedarán aparcados, cuando no apartados, hasta que los partidos no
solucionen lo suyo.
Los resultados obtenidos por
ahora – PP 136, PSOE 86, UP 71, C,s 32 – dan una idea muy aproximada de cómo
quedará esto al final del escrutinio, aunque la distribución de los dichosos “restos”
puedan dar algún diputado a algunas de las cuatro fuerzas que realmente están
en cuestión y se parece muchísimo a los resultados del 20D.
Una cuestión importante guste o
no guste, es que el Partido Popular ha sido el único partido que ha mejorado el
número de escaños obtenidos en las pasadas elecciones. Rajoy ha sido capaz de
mantener su posición y mejorarla con lo que me parece que nadie podría
justificar el veto que desde el PSOE, C,s y UP, han mantenido contra él, durante
toda la campaña.
Rajoy ha ganado las elecciones soportando una campaña brutal
que le ha acusado de todo lo que se les ha ocurrido, sobre todo a Pedro Sánchez
y a Albert Rivera, porque duele decirlo pero es muy cierto que Pablo Iglesias
ha sido mucho más correcto con Rajoy que los otros dos.
No quiero seguir sin comentar mi
equivocación al respecto de los resultados del PSOE. Efectivamente las urnas
han sido más buenas que los sondeos para los socialistas y no se ha producido
el sorpasso. Así que no me duelen prendas reconocer que acertaba Pedro Sánchez
anunciando esa posibilidad y me equivocaba yo cuando no creía en ella. Se ha
librado del sorpasso, pero no debería sacar pecho porque ha obtenido un
resultado todavía peor que el que obtuvo el 20D y no puede obviar que el PP
le ha sacado 50 diputados de diferencia.
Los hay que hablan del voto del
miedo para justificar el éxito de Rajoy, pero no aplican el mismo concepto a
los votos que ha recuperado el PSOE ante la inminente posibilidad del sorpasso,
no es que me resulte extraño porque en la España del cambio, la aplicación de la
doble vara de medir es por desgracia lo normal. Esa situación ha sido favorecida
por los resultados que ofrecían unánimemente las distintas encuestas
advirtiendo del triunfo de UP sobre el PSOE.
Mal asunto porque si publicaban
los resultados que realmente obtenían, tendrán que decir que fallan más que una
escopeta de feria, claro que peor sería que hubieran publicado algo que en realidad no
se parecía en nada a los resultados que obtenían. Pero sea por falta de puntería
o por sobra de intereses bastardos, lo que dejan claro los resultados de estas
elecciones es que las encuestas han perdido su condición de herramientas útiles
para el análisis político electoral.
Los de Unidos Podemos se han
llevado un revolcón, un fracaso sin anestesia, han hecho lo imposible por no
asustar a la parroquia escondiendo las cuestiones más espinosas de su
ideología, pero por ahora a pesar de su “confluencia” con IU no han sido capaces de generar las sinergias
que se suponían lógicas, porque una cosa es la lógica y otra muy distinta la
opinión de los votantes, aunque hay que decir que han tenido la gallardía de reconocerlo.
De Ciudadanos qué decir, estoy
hasta la coronilla de aguantar a naranjitos que se indignaban cuando advertía
de la evanescencia del votante de C,s, bueno pues ya saben lo que hay.
Ciudadanos ha tenido varios problemas de difícil solución. Como único argumento una campaña en
negativo contra Rajoy y han ignorado que un partido
político debe sustentarse en algo más que la buena presencia de su jefe de
filas y la firma de un acuerdo que para nada valió. Con esos mimbres no se
pueden hacer cestos y no lo digo yo, lo han dicho los votantes, que son
ciudadanos españoles y que no les han votado.
Quiero subrayar una cuestión que
me alegra muchísimo a título personal; ya no voy a tener que soportar más la
frase que por repetida me tenía estomagado y que esgrimía de continuo el pesado
de Pedro Sánchez, ya no podrá decir que
los ciudadanos han votado por el cambio, los ciudadanos han votado por la moderación y la experiencia y a eso debería atenerse, lo digo en condicional, porque temo muchísimo
a la inconsistencia política de Sánchez.
Tiene la ocasión para debilitar
a UP pactando con el resto de partidos constitucionalistas, tiene una
oportunidad de oro para recuperar la credibilidad del PSOE y él y su amiguito
Albert deberían tener presente que el PP se les ha llevado votos de gente que votó naranja o socialista el 20D
y se ha arrepentido. Pero le estoy escuchando ahora mismo en la tele y me
parece que no hay el menor ápice de comprensión de una realidad simple y que
sin embargo se le escapa.
Y de lo suyo, de lo nuestro, como
decía el inmortal D. Miguel de Cervantes, paciencia y barajar, no hay otra.
Poco más que añadir. Sólo que, para terminar de redondear la jornada, sería ideal contar con la renovación de todos los líderes políticos o, al menos de los 3 constitucionalistas (del otro no espero nada), que han sabido trasladarnos cumplida muestra de sus intereses y preeminencias reales. Ninguno está dotado de habilidades para la política y de capacidad de negociación.
ResponderEliminarHace un año que Mariano Rajoy debiera haber dado paso atrás y no presentarse a la reelección, presentando una cara nueva. Así no habría habido vetos ni vainas, ni nuevas elecciones, aunque para vainas P. Sánchez y A. Rivera...