Francisco González Ledesma, Barcelona y el inspector Méndez
González Ledesma nació el 17 de marzo de 1927 en Barcelona, lugar
en el que moriría el 2 de marzo de 2015. Sus padres eran obreros, el padre
trabajaba como mozo de almacén y la madre era modista. Vivían en el Pueblo Seco, un barrio mayoritariamente
obrero de la capital catalana. Comenzó sus estudios en Zaragoza, para volver a
Barcelona donde terminó el bachillerato entre los Escolapios y el Instituto
Jaime Balmes, en el que el catedrático – entonces en los institutos de enseñanza
media ejercían la docencia catedráticos – Guillermo Díaz Plaja tuvo una gran
influencia en sus estudios.
Desde siempre fue un contador de historias, cuentan que con
apenas seis años en los recreos contaba historias de su invención a sus
compañeros a cambio de bocadillos y mientras estudió el bachillerato ya
presentaba originales en la Editorial Molino. Para costearse los estudios de Derecho
comenzó a trabajar en la Editorial Bruguera en la que escribía guiones de historietas. Sin acabar la carrera, en el año 1948,
consiguió el Premio Internacional de Novela, instituido por el editor Josep
Janés i Olivé por su novela “Sombras viejas” pero la censura prohibió su
publicación, lo que temporalmente le cerró las puertas para publicar otras novelas.
Se graduó en Derecho en el año 1950. Dos años después bajo
el seudónimo de Silver Kane, empezó a escribir novelas del Oeste para Bruguera llegando a publicar mil títulos, lo que, según afirmaba él mismo, le proporcionó la práctica y los conocimientos que le permitieron comenzar una carrera como novelista. Más tarde escribió “Los
napoleones”, que fue también censurada, “Las calles de nuestros padres” y “Expediente
Barcelona” (finalista del Premio Ciutat de València, en 1983).
En 1984 recibe el Premio Planeta por “Crónica sentimental en
rojo”, un gran paso en su carrera como escritor; pero lo que le da el impulso
definitivo fue el hecho de que Gallimard, la prestigiosa editorial francesa,
decidiera traducir al francés y publicar “Expediente Barcelona”, la primera
novela de la serie del inspector Méndez, lo que le proporcionó un
reconocimiento internacional y un éxito editorial mucho mayor del que
disfrutaba en España, de hecho se producía un suceso muy curioso, a González
Ledesma le publicaban en Francia sus novelas antes de que se editaran en España.
Sin olvidar el resto de su importante producción literaria,
hay que reconocer que consigue el éxito gracias a las novelas protagonizadas por
Ricardo Méndez, el personaje central de las historias negras de Ledesma. Un
inspector de la vieja escuela despreciado por los mandos policiales y
con nulas posibilidades de ascender. Un nostálgico de las mejores noches del
Paralelo y sus mujeres que le llevaron a la perdición más de una vez, demasiado aficionado al coñac
y enemigo declarado de las “nuevas tecnologías”. El inspector aprovecha el
rechazo que despierta entre sus superiores, que prefieren ignorarlo, para trabajar lo más libremente posible y para ello se apoya en su vasta red de confidentes y en su peculiar método de investigación.
Las novelas de la serie están ambientadas en la Barcelona de
los comienzos de los ochenta, a lo largo de sus relatos, González Ledesma
pone de relieve que las malas costumbres y los resabios de la administración
franquista siguen estando instalados en las instituciones presuntamente
democráticas. A través de sus trabajos como jurista y periodista Ledesma había
adquirido un conocimiento enciclopédico sobre Barcelona, su sociedad y los
elementos que seguían manejando las instituciones y los resortes del poder, ese
conocimiento resulta un elemento muy importante a la hora de escribir las
aventuras y sobre todo las desventuras del inspector Méndez.
Así es como Barcelona, la Barcelona de Ricardo Méndez,
acompaña al comisario en el protagonismo de los relatos de González Ledesma,
una ciudad a la que define Enric González -hijo de González Ledesma- como “Una
ciudad en tránsito. El franquismo hacía las maletas o se disfrazaba de otra
época, los poderes sustitutorios no habían llegado todavía y la libertad era un
estado de ánimo sin reglas ni procedimientos democráticos. Era una ciudad desordenada, relativamente pobre y con pocos turistas. No se parecía en nada al
parque temático de la actual Barcelona”
Nuestro autor publicó otras novelas negras, que no forman
parte de la serie Méndez. Relatos como “42 Kilómetros de compasión” (1986), “Cine Soledad” (1993)
y “Tiempo de venganza” (2003) son novelas pertenecientes al género, pero no a
la serie de Méndez. Me parece importante señalar que las novelas de esa serie
tienen tal categoría que entre ellas figuran relatos que consiguieron un Premio
Planeta, un Premio RBA y otros importantes premios literarios.
González Ledesma es un estajanovista del trabajo que sin embargo luce ingenio y calidad en sus textos; nuestro autor trabajó muchísimo para conseguir el éxito que le llegó de la mano del inspector Méndez y de la Barcelona que nos describe. Les dejo una parte de la bibliografía del autor – no incluyo en esa relación las obras escritas bajo seudónimo – en la que me he permitido marcar en negrita las novelas que no perteneciendo a la serie Méndez, son novela negra.
Creo que les merecerá la pena leer alguna de sus obras, muy
probablemente Ricardo Méndez y esa Barcelona, que algunos todavía recordamos, pero que ya no existe salvo en las
páginas de sus novelas, les atrapen.
Bibliografía
Sombras viejas, 1948, Premio Internacional de Novela
El mosquetero azul, 1962
Los Napoleones, 1977
Soldados, 1985
42 Kilómetros de compasión, 1986
Los símbolos, 1987
Cine Soledad, 1993
El adoquín azul, 2002
Tiempo de venganza, 2003
Historia de mis calles, 2006
Serie Méndez:
Expediente Barcelona, 1983
Las calles de nuestros padres, 1984
Crónica sentimental en rojo, 1984, Premio Planeta de Novela
La Dama de Cachemira, 1986, Premio Mystère
Historia de Dios en una esquina, 1991
El pecado o algo parecido, 2002, Premio Hammett
Cinco mujeres y media, 2005, Premio Mystère
Méndez, 2006
Una novela de barrio, 2007, Premio RBA de Novela Policiaca
No hay que morir dos veces, 2009
Peores maneras de morir, 2013
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