Sinopsis de "Al madero no le gusta la ropa vieja" (Segunda parte)

Vista aérea de Puerto Rosario

 

El lunes pasado publiqué una parte de la sinopsis que en su día escribí con la intención de que las editoriales la leyeran antes de hacerlo con los doscientos ochenta y cinco folios del texto, fue una recomendación que se me hizo y parece que quien me aconsejó tenía mucha razón. Por lo visto las editoriales reciben muchísimos textos, los comités de lectura están absolutamente superados y en ocasiones una sinopsis atrayente, que no sea muy larga, puede conseguir que el lector de turno se decida a echarle un vistazo a la novela que presentas.

El exceso de originales presentados es una dificultad conocida por todos, pero además hay que tener en cuenta las programaciones que las empresas tengan previstas, muchísimas editoriales ya tienen cerrados los años 2021 y 2022 y te advierten que cualquier consideración que puedan tener sobre tu novela quedaría con suerte para el año 2023. Así que francamente cuando uno pretende que le publiquen un relato se mete en un mundo muy difícil, lo cierto es que si no eres conocido en el universo literario existen poquísimas posibilidades de conseguir que alguien decida publicar tu relato.

Hoy comparto la segunda parte de ese texto, no sufran demasiado, el viernes publicaré la tercera y acabaré con la sinopsis. Creo que si la compartí con la editorial que ha decidido publicar “Al madero no le gusta la ropa vieja” y la sinopsis ayudó a tomar esa decisión, me parece que debo ofrecérsela a ustedes a ver si tengo suerte y consigue el mismo efecto taumatúrgico que tuvo con mi editor y los transformo, espero que me permitan la sinceridad, en futuros lectores de la novela que buena falta me hace.

 “… El homicidio sorprende al Grupo de Policía Judicial de la Guardia Civil que está en cuadro, de sus cuatro componentes sólo se encuentra presente para el servicio el cabo Santiago Tavío, por lo que la Comandancia de Las Palmas dispone que Damián Hinojosa se sume a la investigación por tener la habilitación correspondiente, y además se ordena a Marc que temporalmente refuerce a la Policía Judicial, para llevar a cabo las labores fotográficas de la inspección ocular y ayudar en las investigaciones.

A Marc la inesperada situación le supera, no tiene la menor experiencia y teme no estar a la altura de las circunstancias, Damián lo intenta tranquilizar. Tavío, Hinojosa y Marc llevan a cabo una minuciosa inspección ocular, cuando la acaban Marc se encuentra agotado pero satisfecho, cree que ha superado la prueba, vuelven a Puerto Rosario y quedan para tener una reunión por la tarde en las dependencia del Grupo de la Policía Judicial en la Casa-Cuartel de la Guardia Civil en la que organizarán la investigación.

Pero desde la Comandancia de Las Palmas se ordena al cabo Tavío que se presente al día siguiente al comandante Castro, con las pruebas que deban  pasar por el laboratorio. La superioridad, de acuerdo con el Juez Instructor y los mandos de Puerto Rosario, decide que la investigación la lleven a cabo los guardias Hinojosa, Marc Rodríguez y Carlos Iniesta, apoyados por una serie de agentes que llevarán a cabo el trabajo que pueda llevarse a cabo desde el cuartel.

Una situación difícil a la que tendrán que hacer frente. En el relato se explica cómo llevan a cabo investigaciones complejas los equipos de Policía Judicial que trabajan en lugares pequeños, como es el caso de Puerto Rosario. Un complicado ejercicio de exigente investigación en la que la falta de medios se suple con el trabajo paciente y minucioso de los guardias.

Marc está pasando un mal momento, a los problemas que le produce el complicado y exigente trabajo de investigación en un ámbito totalmente desconocido, se le añaden los problemas que tiene que superar para ir acomodándose a su vida familiar en casa de Ana Cabrera, su suegra…”

Hasta aquí hemos llegado, como ya les he comentado el viernes cerraré el texto de la sinopsis, espero que si Dios quiere y a ustedes les da paciencia, volvamos encontrarnos ese día en estas páginas. Entretanto cuídense mucho.

Un abrazo.